¿En qué piensas cuando oyes hablar de casas domóticas? Tal vez hayas visto alguna película en la que, por ejemplo, la cocina escucha a los habitantes de la casa y baja del techo un mueble en el que hay la comida que a ellos les apetece; una vivienda que abre las puertas sólo a aquellas personas que identifica como propietarios y amigos y familiares de sus propietarios, etc. No sabemos si estos avances llegarán a hacerse realidad algún día. No obstante, hoy en día podemos hablar de muchas facilidades que ya son una realidad en las casas domóticas. Por domótica deberíamos entender la automatización de las casas, ya sean casas modulares o casas convencionales (aunque nosotros, por supuesto, en este artículo nos referiremos a la domótica en una casa modular. Son construcciones que tienen la capacidad de interactuar de manera total o parcial con diferentes partes o componentes de nuestra casa modular: las luces, los sistemas de ventilación y aire acondicionado y las ventanas, puertas, cortinas y persianas. Entran dentro de la domótica los siguientes ámbitos: la climatización programable, que puede encenderse o apagarse usando telefonía móvil, wifi o ethernet; el control de toldos y persianas eléctricas, que permiten protegerlas automáticamente del viento, sol y lluvia; la racionalización de la electricidad, pudiendo desconectar equipos de uso no prioritario en momentos de sobrecarga (por ejemplo, apagar automáticamente el lavavajillas si se ha puesto al mismo tiempo la secadora y después, volverlo a encender; el apagado y encendido automático o mediante control remoto de las luces de la casa; la regulación de la intensidad de las luces en función de la luminosidad ya existente (por ejemplo, la luz natural que llega de las ventanas); sistemas de porteros automáticos con cámaras; sistemas de alarmas y seguridad y/o similares. Si las casas modulares ya se caracterizan por la eficiencia energética, el ahorro energético y por ser un tipo de construcción sostenible, si le sumamos la domótica conseguiremos una casa modular excepcional, inteligente y autosuficiente. Sin duda, será un hogar que nos permitirá despreocuparnos en muchos aspectos, tal y como actualmente no tenemos que lavar la ropa a mano o ir a buscar agua a una fuente. La domótica se basa en dispositivos electrónicos que permiten que la propia casa modular autogestione sus recursos, ya sea para contribuir a reducir al máximo los gastos en electricidad, agua, gas, etc. En una casa modular domótica se puede programar el aire acondicionado para que se encienda antes de que lleguemos a casa, que las persianas suban o bajen automáticamente a determinada hora del día, con el consiguiente ahorro de luz, y/o similares. Se trata no solamente de proporcionar cada vez más comodidades y facilidades a los habitantes de una casa domótica sino también de realizar construcciones basadas en la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente. Es por este motivo que no hay que sentir remordimientos al realizar instalaciones domóticas en nuestra casa modular.
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